Exhortan a mejorar finanzas personales con ahorro inteligente
Entre los puntos clave están la educación financiera sobre tasas reales positivas, así como el iniciar con un ahorro del 10% de los ingresos personales.
Contar con conocimientos básicos sobre ahorro, inversión y financiamiento es de suma relevancia para tomar decisiones acertadas en la vida cotidiana, especialmente en un entorno económico cambiante.
Así lo señaló el Lic. Ricardo Osorio Miranda, socio y director del grupo Rixo, quien estuvo como invitado en el desayuno catorcenal del Colegio de Contadores Públicos de Baja California (CCPBC), con la charla titulada “Tus finanzas personales”.
“El error más común es no tener conciencia acerca de los tipos de tasa de interés; la mayoría de las instituciones pagan tasas reales negativas y eso implica que lejos de ganar, tu dinero está perdiendo poder adquisitivo“, apuntó.
El experto advirtió que muchos inversionistas caen en la trampa de buscar ganancias sin riesgo, lo cual no existe dentro de los instrumentos legales, ya que la relación entre riesgo y rendimiento siempre está presente.
Además, consideró que el tipo de cambio suele generar confusión, pues muchas personas compran dólares con la esperanza de obtener una ganancia, sin necesidad real de operar en esa divisa, lo cual puede convertirse en una estrategia poco efectiva.
En ese sentido, el expositor recomendó buscar tasas reales positivas, informarse con fuentes confiables y aprovechar las herramientas digitales disponibles, como una forma de fortalecer la educación financiera desde el nivel individual.
Por su parte, el Dr. Sergio Vázquez, presidente del CCPBC, destacó que el primer paso para mejorar las finanzas personales es establecer el hábito del ahorro, sin importar el nivel de ingresos, ya que la constancia es lo que genera resultados.
“El primer punto es el hábito del ahorro y lo recomendable es empezar con el 10% de tus ingresos; si de plano no puedes, entonces con el 5%, pero lo importantes es empezar para ir formando ese hábito”, expresó.
Para concluir, el dirigente coincidió en que el uso del dólar como refugio financiero debe evaluarse con base en necesidades reales y no en especulación, ya que su comportamiento es incierto y no garantiza rendimientos en el corto plazo.