En una ciudad fronteriza marcada por la movilidad, la multiculturalidad y también la vulnerabilidad social, la salud mental se ha convertido en uno de los grandes retos del Siglo XXI, ya que factores como la violencia, el consumo de fentanilo y el estrés urbano elevan el riesgo de trastornos emocionales en la población.
Así lo advirtió el Dr. Omar Jonathan Solís Adame, médico psiquiatra y miembro activo del Baja Health Cluster, quien señaló que Tijuana enfrenta una carga emocional creciente que exige atender los padecimientos mentales desde un enfoque integral, humano y libre de estigmas.
“Hoy más que nunca debemos entender que la salud mental no es sólo ausencia de enfermedad, sino la capacidad de disfrutar la vida, aprender, trabajar y convivir con los demás”, afirmó el especialista.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada cuatro personas desarrollará algún trastorno mental en el transcurso de su vida, mientras que en México, cerca del 20% de la población adulta ha experimentado ansiedad, depresión, insomnio u otros padecimientos emocionales.
Sin embargo, el Dr. Solís señaló que muchas personas no reciben atención oportuna, ya que aún persisten barreras como el estigma, la falta de información, el miedo al juicio social y el acceso limitado a servicios especializados, sobre todo en zonas con menor cobertura médica.
“El paciente con enfermedad mental no sólo sufre la condición, sino también la exclusión; en muchos casos, pedir ayuda se interpreta como debilidad, cuando en realidad es el primer paso hacia la recuperación”, expresó el psiquiatra.
Además, subrayó que en Tijuana, aunado al fenómeno migratorio, también inciden factores como el desempleo, el desarraigo social y la exposición a drogas sintéticas, lo que incrementa el riesgo de crisis emocionales tanto en jóvenes como en adultos mayores, sin que exista una infraestructura suficiente para su contención.
En ese sentido, destacó que desde el Baja Health Cluster se han puesto en marcha estrategias de colaboración con especialistas, difusión de campañas y esfuerzos por ampliar el acceso a la salud mental, con el fin de normalizar su abordaje y erradicar el tabú en torno a la atención psicológica y psiquiátrica.
“Cuidar la salud mental es un acto de humanidad, de responsabilidad colectiva y también de visión de futuro, una sociedad sana emocionalmente es una sociedad más productiva, más solidaria y más fuerte”, concluyó.
Para quienes necesiten apoyo, el Dr. Omar Jonathan Solís Adame brinda consulta en la Clínica Ikigai Salud Integral, ubicada en Tijuana, y puede ser contactado al (664)770-1002, o bien, a través de la página www.ikigaisaludintegral.com.