Tijuana, 13 de mayo de 2022.- el titular Municipal de Atención al Migrante, Enrique Lucero Vázquez consideró que los trabajos realizados en el desalojo de la Garita El Chaparral y la atención brindada al proceso migratorio de los desplazados ucranianos son un claro ejemplo de coordinación entre los tres niveles de gobierno, asociaciones civiles y el gobierno de Estados Unidos.
El funcionario precisó que el 50% de las personas en contexto de movilidad que se encuentran en Tijuana son familias desplazadas por la violencia en Michoacán y Guerrero, otro 30% corresponde a migrantes de origen centroamericano y el resto son de otras nacionalidades. Entre las que destacan haitianos, rusos y brasileños.
Añadió que tras las gestiones realizadas por la sociedad civil con el gobierno estadounidense, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza aceptó el paso por la Garita de El Chaparral de migrantes que ya fuero empadronados previamente por organizaciones.
Comentó que estas personas se encontraban varadas por las instauración del Título 42 y están siendo aceptadas por temas médicos, de discapacidad o bien de una evidente persecución política o del crimen organizado.
“Ya hicieron la encuesta, solo tienen que esperar su turno a que les llamen y hay que cuidar mucho este proceso, hasta el momento van 1034 ingresos de sobretodo mexicano, haitianos, centroamericanos y rusos”.
Los migrantes se reúnen en la Unidad Deportiva Benito Juárez que funciona como centro de reunión antes de partir a la línea internacional.
Agregó que con el posible término del Título 42, es muy poco probable que llegue otra caravana migrante como tal a la región.
“El Instituto Nacional de Migración ha instalado una estrategia, los que entran en caravana entran a la fuerza y se van caminando porque no pueden tomar un camión si no tienen una credencial del INAMI entonces lo que hace el INAMI trata de convencerlos, les dan la condición de refugiados para puedan desplazarse, hasta el momento han tenido éxito, han logrado negociaciones y han desintegrado muchísimas caravanas, o se cansan, o ya no logran seguir o se apegan al apoyo que les da el INAMI, pero siempre va a estar esa alerta” comentó.
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